El próximo presidente electo, Lai Ching-te, está a punto de asumir su cargo. En una entrevista exclusiva con ETtoday News Cloud el día 14, el ex presidente de la Fundación de Intercambios entre Taiwán y China, Hong Chi-chang, analizó que la presidenta Tsai Ing-wen ha creado un concepto de “una sola China” de manera creativa bajo la estructura de la Constitución de la República de China y la Ley de Relaciones entre las Personas de Taiwán y China. En el futuro, Lai Ching-te seguirá esta guía de estabilidad, consistencia y previsibilidad sin sorpresas para tratar los asuntos de ambos lados del Estrecho.
El concepto de “una sola China” ha sido un tema controversial en las relaciones entre Taiwán y China continental. Sin embargo, bajo la administración de la presidenta Tsai Ing-wen, se ha logrado una especie de “ambigüedad creativa” en esta cuestión. A través de la estructura de la Constitución de la República de China y la Ley de Relaciones entre las Personas de Taiwán y China, se ha creado un espacio para la cooperación y el diálogo entre ambos lados del Estrecho.
En este sentido, el próximo presidente, Lai Ching-te, deberá seguir esta guía y mantener una postura estable y consistente en sus relaciones con China continental. Se espera que siga el camino trazado por la presidenta Tsai Ing-wen y continúe promoviendo la estabilidad y la paz en la región.
Bajo esta perspectiva, Lai Ching-te tendrá un papel crucial en el mantenimiento de la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán. Se espera que siga la línea de la presidenta Tsai Ing-wen y mantenga una postura firme en defensa de los intereses de Taiwán.
Además, se espera que Lai Ching-te continúe promoviendo la cooperación económica y cultural entre Taiwán y China continental. A través de un enfoque pragmático y constructivo, se pueden lograr avances en la relación entre ambos lados del Estrecho.
En conclusión, el próximo presidente, Lai Ching-te, tiene una gran responsabilidad en sus manos. Se espera que continúe el legado de la presidenta Tsai Ing-wen y trabaje por la paz y la estabilidad en la región. Con una postura estable y consistente, Taiwán puede seguir avanzando en su camino hacia un futuro próspero y pacífico.