El 1 de agosto, un incendio ocurrió en la famosa Estatua de la Tierra de los fideos instantáneos y el templo Chenglong en Zhongliao, Nantou. El fuego se extendió rápidamente y el templo quedó envuelto en llamas, destruyendo completamente el pabellón de adoración y otras instalaciones. Afortunadamente, la estatua del Dios de la Tierra, que estaba siendo venerada, permaneció intacta e incluso su característica barba no se deformó por el fuego, lo cual fue considerado un milagro por la comisión principal.
Después de casi dos meses de reparaciones, el templo Chenglong finalmente ha sido restaurado por completo. Hoy (25 de octubre) se llevó a cabo una ceremonia para colocar la estatua del Dios de la Tierra en su trono, y después del servicio religioso de mañana, se permitirá a los devotos disfrutar de una taza de fideos calientes. Esta tradición de ofrecer fideos instantáneos se remonta a la década de 1970, cuando el antiguo dueño del templo tuvo un sueño en el que la estatua del Dios de la Tierra le pedía que ofreciera fideos calientes a los visitantes. Desde entonces, esta tradición se ha convertido en una marca distintiva del templo Chenglong.
La restauración del templo Chenglong ha sido un verdadero desafío, pero gracias a los esfuerzos incansables de la comunidad local y los devotos, el resultado final es verdaderamente asombroso. La estatua del Dios de la Tierra se ve más majestuosa que nunca y ha sido devuelta a su lugar de honor en el templo.
El templo Chenglong es uno de los lugares más sagrados y visitados en la región de Nantou. A lo largo de los años, ha sido testigo de incontables historias y ha sido un refugio espiritual para muchas personas. La devoción hacia el Dios de la Tierra se ha mantenido firme incluso en la cara de la adversidad, como lo demuestra el reciente incendio. Su estatua todavía permaneció incólume, un recordatorio de su poder y protección.
El templo Chenglong tiene como objetivo servir a la comunidad y ofrecer un espacio para la adoración y la reflexión. También es conocido por su atmósfera amigable y acogedora, donde los visitantes pueden disfrutar de una taza de té caliente y un plato de fideos mientras conversan con la gente local. Es un lugar donde las diferencias culturales y religiosas se dejan de lado y se celebra la unidad y la amistad.
El regreso del Dios de la Tierra al templo Chenglong marca un nuevo comienzo para la comunidad y una inspiración para todos. Es un recordatorio de la fuerza y la resiliencia de la gente de Nantou, y un ejemplo de cómo la fe y la dedicación pueden superar cualquier obstáculo. Esperamos que este templo continúe siendo una fuente de inspiración y un lugar de paz y armonía para todos los que lo visitan. ¡Que la estatua del Dios de la Tierra proteja siempre este templo y su comunidad!
