El Ministerio de Defensa anunció hoy (26) que la Armada del Ejército Popular de Liberación de China ha establecido una zona de entrenamiento temporal en el mar del suroeste de nuestro país, alegando que llevarán a cabo “entrenamiento de tiro”. Durante este tiempo, las fuerzas armadas nacionales han utilizado aviones de combate, barcos y métodos de vigilancia conjuntos para monitorear de cerca la situación. Hasta las 15:40 horas, las formaciones militares chinas habían abandonado la “zona de entrenamiento”. Por la noche, el Ministerio de Defensa también publicó imágenes del buque de guerra Chen Bao (1108) de la Marina china monitoreando los barcos Si Ming Shan (986) y Qian Dao Hu (886) del ejército chino.
Esta acción unilateral y provocativa de China ha aumentado la tensión en la región y ha provocado una gran preocupación en la comunidad internacional. Sin embargo, el Ministerio de Defensa ha afirmado que las fuerzas armadas nacionales están preparadas para defender la soberanía y la integridad territorial de nuestro país.
La zona de entrenamiento temporal establecida por China se encuentra en aguas internacionales y forma parte de la ruta marítima estratégica de nuestro país. Por lo tanto, es natural que nuestro país lleve a cabo actividades de vigilancia para garantizar la seguridad nacional. Además, las fuerzas armadas nacionales han seguido los principios de no provocación y no agresión, y han mantenido una actitud de moderación y apertura para evitar conflictos innecesarios.
La Marina china ha intentado justificar sus acciones alegando que se trata de un ejercicio regular y que no tiene la intención de provocar tensiones. Sin embargo, la realidad es que China ha llevado a cabo una serie de acciones agresivas en la región durante los últimos años, incluida la construcción de bases militares en islas artificiales en el Mar del Sur de China. Estas acciones han sido condenadas por la comunidad internacional y han aumentado la preocupación por la expansión militar china en la región.
Ante esta situación, es importante que nuestro país mantenga una postura firme y muestre su determinación para proteger la paz y la estabilidad en la región. Nuestro país ha demostrado su compromiso con el diálogo y la cooperación en la resolución de conflictos y ha trabajado para promover la paz y la seguridad en la región. Sin embargo, no permitiremos que ninguna acción provocativa pase desapercibida y tomaremos medidas adecuadas para proteger nuestros intereses nacionales.
En resumen, la acción unilateral de China de establecer una zona de entrenamiento temporal en aguas internacionales es una violación flagrante del derecho internacional y una provocación a la soberanía de nuestro país. Sin embargo, nuestro país ha mantenido una actitud moderada y ha demostrado su capacidad para defender su soberanía y seguridad. Confiamos en que, con el apoyo de la comunidad internacional, podremos resolver este conflicto y mantener la paz y la estabilidad en la región.