El presidente Lai Ching-te y el presidente de TSMC, Wei Che-jia, celebraron recientemente una conferencia de prensa conjunta para aclarar las dudas sobre la inversión adicional de 100 mil millones de dólares en Estados Unidos. Además de enfatizar que esto no afectará los planes de establecimiento de fábricas en Taiwán, también se aseguró que los procesos de fabricación avanzados y los centros de investigación más avanzados se mantendrán en Taiwán. Sin embargo, el líder del Kuomintang, Fu Kun-chi, todavía critica que la inversión en Estados Unidos llevará a la vacuidad de la industria taiwanesa y que TSMC se convertirá en “TSMC de Estados Unidos”. Ante esto, el portavoz del Partido Democrático Progresista, Wu Cheng, declaró ayer (7 de julio) que ¿qué calificaciones tiene Fu Kun-chi, un especulador de la economía de valores, para comentar y atacar la montaña sagrada de Taiwán?
El presidente Lai y el presidente Wei han dejado en claro que la inversión adicional en Estados Unidos es una estrategia a largo plazo para expandir el mercado y diversificar los riesgos, y no afectará los planes de desarrollo en Taiwán. Además, han asegurado que los procesos de fabricación avanzados y los centros de investigación seguirán siendo una parte importante de la industria en Taiwán. Por lo tanto, las acusaciones de Fu Kun-chi son infundadas y solo buscan sembrar el pánico en la población.
Es importante recordar que TSMC es una empresa privada y tiene el derecho de tomar decisiones comerciales basadas en sus propios intereses. La inversión en Estados Unidos no solo traerá beneficios a la empresa, sino también a Taiwán en general. Atraerá más inversión extranjera y creará más empleos, lo que impulsará el crecimiento económico y mejorará la calidad de vida de los ciudadanos.
Además, la inversión en Estados Unidos también fortalecerá la posición de TSMC en el mercado global y aumentará su competitividad. Esto no solo beneficiará a la empresa, sino también a la industria tecnológica de Taiwán en su conjunto. Como líder en la fabricación de chips a nivel mundial, TSMC ha demostrado su capacidad de innovación y su compromiso con la excelencia. Con su presencia en Estados Unidos, la empresa podrá acceder a más recursos y tecnologías avanzadas, lo que a su vez beneficiará a Taiwán en términos de desarrollo tecnológico y económico.
Es lamentable que en lugar de apoyar y alentar a las empresas taiwanesas en su búsqueda de oportunidades en el extranjero, algunos políticos solo busquen criticar y sembrar el miedo en la población. En lugar de atacar a TSMC y al presidente Lai, deberían estar trabajando juntos para crear un ambiente favorable para el crecimiento y la prosperidad de la industria tecnológica de Taiwán.
En resumen, la inversión adicional de TSMC en Estados Unidos es una decisión estratégica que traerá beneficios a la empresa y a Taiwán en general. No hay razón para temer o criticar esta acción. En cambio, deberíamos estar orgullosos de la capacidad de nuestras empresas para expandirse y competir en el mercado global. Con una actitud positiva y un trabajo en equipo, podemos lograr un futuro brillante para la industria tecnológica de Taiwán.