La ciudadana china Liu Zhenya, también conocida como “Aya”, ha sido recientemente expulsada de Taiwán después de que el Servicio de Inmigración la acusara de violar la Ley de Inmigración y la Ley de Relaciones entre el Pueblo de Taiwán y el Pueblo de China. ¿La razón? Sus comentarios inapropiados en TikTok y YouTube, donde a menudo expresaba su apoyo a la unificación forzada de Taiwán con China.
Liu Zhenya, quien se casó con un ciudadano taiwanés en 2017 y obtuvo un permiso de residencia por razones familiares, se ha vuelto famosa en las redes sociales por sus videos en los que promueve la idea de que Taiwán debe ser “reunificado” con China. Sin embargo, sus comentarios han generado una gran controversia y han sido denunciados por muchos taiwaneses.
El diputado del Partido Democrático Progresista, Shen Boyang, ha tomado medidas al respecto y ha establecido una “línea divisoria” para distinguir entre los comentarios que son aceptables y los que no lo son. Según Shen, hay tres categorías de comentarios relacionados con la unificación de Taiwán y China: los que son aceptables, los que son inapropiados pero no ilegales, y los que violan la ley.
En la primera categoría, se encuentran los comentarios que respetan la soberanía y la democracia de Taiwán, así como los que promueven la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán. En la segunda categoría, se encuentran los comentarios que pueden ser considerados inapropiados, pero que no violan la ley. Por ejemplo, aquellos que expresan la opinión de que Taiwán y China deberían unirse pacíficamente en el futuro, pero respetando los derechos y la voluntad del pueblo taiwanés.
Finalmente, en la tercera categoría, se encuentran los comentarios que violan la ley, como los de Liu Zhenya. Estos incluyen aquellos que promueven la unificación forzada de Taiwán y China, así como los que atacan la democracia y la soberanía de Taiwán.
La expulsión de Liu Zhenya ha sido recibida con una gran satisfacción por parte de muchos taiwaneses, quienes ven su partida como una victoria para la democracia y la libertad de expresión. Además, esta acción del gobierno envía un mensaje claro de que los comentarios que violan la ley y atacan la soberanía de Taiwán no serán tolerados.
Es importante recordar que Taiwán es una nación soberana e independiente, y que su futuro debe ser decidido por su pueblo. La unificación forzada con China no es una opción aceptable para la mayoría de los taiwaneses, y cualquier intento de imponerla será resistido.
En resumen, la expulsión de Liu Zhenya y la “línea divisoria” establecida por el diputado Shen Boyang son un recordatorio de que la libertad de expresión no es absoluta y que hay límites que no deben ser cruzados. Esperamos que esta acción ayude a promover un diálogo más respetuoso y constructivo entre Taiwán y China en el futuro.