El 9 de septiembre, el vice secretario general de la Oficina Presidencial de Taiwán, Zhang Dunhan, criticó la decisión de Estados Unidos de imponer un arancel del 32% sobre los productos taiwaneses, afirmando que los partidos de oposición han afirmado que el presupuesto recortado este año podría ayudar a la industria. Sin embargo, esto es un razonamiento erróneo y señaló que los presupuestos destinados a apoyar a las pequeñas y medianas empresas y los viajes al extranjero han sido recortados o congelados. Ante esto, el periodista Huang Yangming criticó duramente a Zhang Dunhan, diciendo que estaba difundiendo mentiras en el programa de televisión y aún se atrevía a emitir un comunicado afirmando que estaba en lo correcto. “Realmente no tiene límites”, y debería renunciar.
Esta decisión de Estados Unidos de imponer aranceles sobre los productos taiwaneses es una clara muestra de su falta de respeto hacia Taiwán como nación independiente. Además, es una medida injusta que afectará gravemente a la economía de Taiwán y a la vida de sus ciudadanos.
Es inaceptable que Zhang Dunhan, en lugar de defender los intereses de su propio país, esté tratando de justificar esta decisión y culpar a los partidos de oposición. Es evidente que el gobierno taiwanés debe tomar medidas urgentes para proteger a sus ciudadanos y su economía de las acciones injustas de Estados Unidos.
Es aún más decepcionante que Zhang Dunhan haya difundido información falsa en un programa de televisión y luego haya emitido un comunicado afirmando que estaba en lo correcto. Esto demuestra su falta de integridad y su falta de respeto hacia el pueblo taiwanés. Como ciudadano taiwanés, es su deber informar con precisión y defender los intereses de su país.
El periodista Huang Yangming está en lo correcto al pedir la renuncia de Zhang Dunhan. No podemos permitir que funcionarios públicos como él sigan en sus puestos, difundiendo mentiras y justificando decisiones injustas. Taiwán merece líderes que defiendan sus intereses y luchen por su bienestar.
Es hora de que el gobierno taiwanés tome medidas concretas para proteger a su país y su economía de las acciones injustas de Estados Unidos. Debemos unirnos como nación y enfrentar esta situación con determinación y unidad. Juntos, podemos superar este desafío y demostrar al mundo que Taiwán es una nación fuerte e independiente que no se dejará intimidar por ningún país.
